Si bien de vez en cuando nos puede asaltar alguna duda, es un problema que debe y puede ser superado. La Biblia nos dice cómo saber si somos salvos.
Existen varias maneras en las que puede estar absolutamente seguro de que es salvo. En primer lugar, puede saber que es salvo porque Jesucristo murió por usted. Su sangre limpia todos los pecados que usted pueda cometer. Puede saber que es salvo porque Jesucristo, el Hijo de Dios, murió para comprar su salvación. Eso es un hecho histórico. Esa es la obra salvadora de Cristo. Si confía en Cristo, esa salvación es suya.
También puede saber que es salvo por el testimonio interno del Espíritu Santo. Como dice en 1 Juan 5:6: «Y el Espíritu es el que da testimonio, porque el Espíritu es la verdad».
El Espíritu Santo de Dios hace que las verdades sobre la obra de Cristo sean reales para usted. Verá, Dios nos dio la obra de Cristo. Pero para hacer real la obra de Cristo en nosotros, Él nos dio el Espíritu. A través de la fe, recibimos el testimonio de Dios por medio del Espíritu de que Cristo murió por nuestros pecados y resucitó de entre los muertos.
Finalmente, la Biblia misma le asegura que es salvo. Su salvación no depende de sus emociones. Tiene un registro oficial. Tiene la Palabra de Dios: «Les he escrito estas cosas a ustedes, los que creen en el nombre del Hijo de Dios, para que sepan que tienen vida eterna» (1 Juan 5:13).
La Biblia promete que, si ha creído en el Hijo de Dios, entonces verdaderamente es salvo y puede estar seguro de su relación con Dios.